Tu bebé y su sistema sensorial

Cómo percibe el mundo: los 5 sentidos de tu bebé

Más abarazos Huggies Más Abrazos // Jueves 3 Septiembre, 2020 // #bebe, #emociones, #maternidad

¿Cómo siente el mundo tu bebé?

Desde que tu bebé alcanza las 28 semanas de gestación es capaz de escuchar los latidos de tu corazón, sentir el calor del líquido amniótico e incluso percibir sabores, pero ¿cómo percibe el mundo a través de cada sentido una vez que nace?

Después de su nacimiento, tu bebé comienza a percibir el mundo y su sistema nervioso recibe tanta información que se cansa rápidamente, lo que le provoca sueño. Mientras duerme, su cerebro procesa toda esa nueva información, ¡por eso es que a los recién nacidos les encanta dormir todo el tiempo!

Ayudalo a percibir un entorno amoroso

Vista:

Durante los primeros días su visión es borrosa, por lo que lo mejor para que comience a reconocerte es mantener sus ojos a una distancia de 20 cm de tu rostro. Al principio, distinguirá con más claridad las imágenes de colores muy contrastantes, así como las imágenes en blanco y negro. Al cumplir su primera semana será capaz de reconocer tu rostro.

Tacto:

Aunque no sea capaz de verte con claridad, tu bebé siente todas tus caricias, así como los cambios de temperatura en su entorno. Mientras percibe estos estímulos su cerebro va formando una especie de mapa interno de su cuerpo. Esta conciencia, así como sus movimientos y reflejos innatos son esenciales para el desarrollo pleno de sus habilidades motoras y sensoriales. Además, el desarrollo del sentido del tacto también es muy importante para su desarrollo emocional.

Oído:

¡Tu voz será su sonido favorito! Esto se debe a que era el sonido que escuchaba con más claridad cuando estaba en tu vientre. Durante su primer año, tu bebé se enfoca básicamente en identificar de dónde vienen los sonidos.

Olfato y gusto:

Sus sabores preferidos son dulces y su sentido del olfato es tan sensible que aprende a reconocer el olor de tu leche materna, así como tu olor corporal casi inmediatamente después de nacer. Si tu bebé no quiere dormir, está muy inquieto o no deja de llorar, una buena idea para calmarlo es envolverlo con la camisa que usaste durante el día, ¡tu olor le ayudará a relajarse!