Más Abrazos // Miércoles 20 Mayo, 2020 // #parto, #salud, #maternidad, #cuidados
La partera representa la figura femenina con experiencia que viene a aportar calma y saber a la futura mamá. En el parto natural y en el parto en casa, la obstétrica o partera cobra un lugar muy especial, ya que justamente se define como aquella persona habilitada para la atención de embarazos, partos y puerperios normales.
Cuando la mamá ha decidido junto con su familia que el parto se desarrollará en su casa, la relación con la partera se va estableciendo desde los primeros meses del embarazo con esta premisa: llegar juntas a conocerse para alcanzar lo que la mujer embarazada ha logrado ir definiendo como un parto ideal. La relación se profundiza en las últimas semanas en las que se transmiten los detalles de lo que será el trabajo de parto.
Cuando la futura mamá siente las primeras contracciones se lo comunica a la partera quien acude a la casa una vez que la mujer siente que llegó la hora de requerir su compañía, sin duda, cuando el trabajo previo ha comenzado.La partera se mantiene en constante comunicación con el obstetra para tenerlo al tanto de cuándo su presencia será requerida en la casa. En el momento en que empiecen los primeros dolores fuertes, será la partera quien recordará a la parturienta, cuál era su plan ideal, cuáles eran sus sueños para este momento, cuáles eran los pasos acordados en relación a respiración, relajación y actitud. Luego, la ayudará a explorar las herramientas para poder hacerlo posible.Para que un parto en casa cumpla con las condiciones ideales, la partera elegida debe tener el don de la sensibilidad, la empatía y la apertura suficientes como para entender que cada parto y cada mujer son diferentes.El éxito de esta mujer que en épocas pasadas se conocía como “matrona”, depende sobre todo de su habilidad para poner sus propios recursos a favor de un parto saludable.
Comparte: